La palabra es más rápida que la bala
Queremos hablar todos a la vez, y no nos escuchamos. Todos queremos tener la razón, pero nadie se anima a callar primero, por miedo a perder la batalla de los argumentos, que nacen desde la desesperación misma que tenemos por defender lo que pensamos, sin ni siquiera cuestionar si estamos equivocados o no. Por naturaleza,…